viernes, 26 de marzo de 2010

China y Moscú se unen en una Liga Panasiática


Los rumores se han confirmado. El coqueteo de Pekín con el gobierno de Moscú tras la ruptura de las relaciones con Irán se ha consumado. Hace tan sólo unos minutos ambas potencias han anunciado la creación de una Liga Panasiática con el fin de contrarrestar las fuerzas estadounidenses e iraníes destacadas en Oriente Medio. Esta alianza supone un equilibrio en la partida de ajedrez que, en la actualidad, hay en juego en esta conflictiva zona. De este modo, las piezas de la partida ya están a punto de comenzar los primeros movimientos que, de realizarse, podrían desencadenar una nefasta guerra. Algo que, según fuentes consultadas por esta agencia, no es un fin buscado por ninguna de las potencias implicadas.

Entre los términos inherentes a esta alianza, China ha lanzado una serie de exigencias a EE.UU e Irán:



- Ruptura de las relaciones diplomáticas entre Estados Unidos e Irán, en un plazo máximo de hasta las 12 horas del 27 de Marzo de 2034.
- Retirada de las tropas de apoyo militar estadounidenses destinadas en territorio iraní, en un plazo máximo de hasta las 12 horas del 27 de Marzo de 2034.


En el caso del no cumplimiento de dichas exigencias, la Liga Panasiática anuncia cortes en los suministros energéticos de la Federación a la Unión Europea y Turquía. Asimismo, la Liga amenaza con crear una política aduanera destinada a perjudicar los productos norteamericanos dirigidos al mercado asiático y ruso, lo que supondría un gran varapalo al comercio de EE.UU, pues supondría la pérdida de uno de los mercados más importantes del mundo, compuesto por 2.500 millones de potenciales consumidores.

Con este anuncio, la Liga entre China y la Federación pone entre las cuerdas al eje Teherán-Washington y dibuja un nuevo panorama en Oriente Medio.